El 30 de enero celebramos el Día de la Paz, en recuerdo de la muerte de Ghandi. Hasta ahora nunca se me había ocurrido conectar esta fecha con los libros o las bibliotecas; pero leyendo el blog de Ana Nebreda, Biblioabrazo, encuentro muy interesante la relación que ella establece entre lectura y paz. Leer puede ser un camino hacia la paz, porque gracias a la lectura nos acercamos a otras formas de ver el mundo y, con ello, multiplicamos nuestra visión de la realidad y nuestra tolerancia. Para sintetizar esta hipótesis, utiliza una cita de la escritora brasileña Nélida Piñón: "la lectura nos acerca al saber, a los afectos, y nos hace desprendernos de convicciones". Tener convicciones podría pensarse que es algo totalmente positivo, muy beneficioso para el ser humano, sin embargo, todo llevado al extremo resulta peligroso.
He querido compartir este mensaje con todo el centro y por ello lo he colocado en un mural a la entrada de la biblioteca, acompañado de libros juveniles ilustrados.
He querido compartir este mensaje con todo el centro y por ello lo he colocado en un mural a la entrada de la biblioteca, acompañado de libros juveniles ilustrados.
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